El 8 de Noviembre, 2020 - El Juicio Final - La Oración de Moisés

Probado por familias, para familias (y otros también). Iglesia en Casa es un servicio interactivo de adoración semanal que se puede usar desde la seguridad de su hogar. Cada servicio se centrará en un tema y tendrá 3 canciones, lecturas y oraciones, un mensaje corto (4-5 minutos) para los niños y un mensaje más largo (10 minutos) para toda la familia.
— Explicación de iglesia en casa

Muchas gracias por considerar nuestro servicio Iglesia en Casa.

Directamente abajo en español y aquí en inglés hay un servicio de adoración para usar en casa para leer como una familia, un individuo, o un grupo pequeño. Se incluyen enlaces a canciones y mensajes pastorales (inglésespañolbilingüe y para niños) que estarán disponibles cada sábado en Youtube. El jefe de familia puede liderar (L) y otros pueden responder (C) o todos pueden turnarse para leer las lecturas. Use los enlaces para las canciones y mensajes en el momento apropiado. No se sienta presionado para pasar por todo el asunto de una sola vez. Más bien, use cada elemento de este servicio para que sirva como una bendición para usted y su familia.

Si tiene una petición o si adora de esta manera este fin de semana, le pedimos que use o complete nuestra tarjeta de contacto en linea, o en el enlace a continuación en el servicio. ¡Comente para hacernos saber cómo fue y cualquier sugerencia que pueda tener!

Si le gustaría recibir este servicio de Iglesia en Casa cada semana por correo, puedes suscribir usando la forma más abajo, después del servicio.

Finalmente, puede ver a nuestro boletín de anuncios o más información de nuestra iglesia aquí.

¡Que Dios bendiga su servicio de Iglesia en Casa esta semana!

Pastor William Dunn

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¡El Juicio Final!

¡La Oración de Moisés!

Hoy, leemos un Salmo escrito por Moisés, recordándonos que solos somos polvo. Nuestros días son como bocanadas de diente de león en el viento. A la luz de eso, se nos alentará a "contar nuestros días correctamente", sabiendo que, en Cristo, estamos completamente preparados para el juicio final.

En el juicio final, todo el mundo va a tener que presentarse ante Dios el juez justo quien va a juzgar a todos en su justicia.

El Himno de Apertura - Habla oh Dios

La Invocación

L. En el nombre del Padre y del ☩ Hijo y del Espíritu Santo.

C. Amén. 

La Confesión y Absolución

Comenzamos el servicio reconociendo cómo nos hemos pecado y están privados de la voluntad y el deseo de Dios para nuestras vidas, y recibimos las buenas nuevas de que somos perdonados en Jesucristo.

L. Acerquémonos a Dios con un corazón recto y confesemos nuestros pecados, pidiéndole en el nombre de Jesucristo para perdonarnos.

C. Dios de la vida, confieso que soy por naturaleza muerto en el pecado. Por preocupar sin fe y auto-orgullo, por los pecados de hábito y los pecados de voluntad, por lo malo que he hecho y lo bueno que he dejado de hacer, tú debes arrojarme de tu presencia por siempre. Oh Dios, lo siento por mis pecados. Perdóname, por los méritos de Jesucristo.

L. Cristo ha muerto. Cristo ha resucitado. Cristo vendrá de nuevo. Por su gran misericordia, Dios nos ha hecho vivos en Cristo aun cuando estábamos muertos en nuestros pecados. Oigan la palabra de Cristo tal como lo proclamó al paralítico: "Ten, ánimo, los pecados te son perdonados." Tomemos en serio este perdón y lo proclamémonos el uno al otro en el nombre del Padre, y del Hijo ☩ y del Espíritu Santo. Amén. 

La Oración del Día

L. Todopoderoso y sempiterno Dios, que has dado a los que creen muy grandes y preciosas promesas: Concédenos que sin ninguna duda, mas con perfecta confianza, creamos en tu Hijo Jesucristo de manera que nuestra fe nunca sea reprobada ante tus ojos; por Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor, que vive y reina contigo y con el Espíritu Santo, siempre un solo Dios, por los siglos de los siglos.

C. Amén. 

La Primera Lectura - Salmo 90

Oración de Moisés, hombre de Dios.

1 Señor, tú has sido nuestro refugio generación tras generación. 2 Desde antes que nacieran los montes y que crearas la tierra y el mundo, desde los tiempos antiguos y hasta los tiempos postreros, tú eres Dios.

3 Tú haces que los hombres vuelvan al polvo, cuando dices: «¡Vuélvanse al polvo, mortales!»

4 Mil años, para ti, son como el día de ayer, que ya pasó; son como unas cuantas horas de la noche.

5 Arrasas a los mortales. Son como un sueño. Nacen por la mañana, como la hierba

6 que al amanecer brota lozana y por la noche ya está marchita y seca.

7 Tu ira en verdad nos consume, tu indignación nos aterra.

8 Ante ti has puesto nuestras iniquidades; a la luz de tu presencia, nuestros pecados secretos.

9 Por causa de tu ira se nos va la vida entera; se esfuman nuestros años como un suspiro.

10 Algunos llegamos hasta los setenta años, quizás alcancemos hasta los ochenta, si las fuerzas nos acompañan. Tantos años de vida, sin embargo, sólo traen pesadas cargas y calamidades: pronto pasan, y con ellos pasamos nosotros.

11 ¿Quién puede comprender el furor de tu enojo? ¡Tu ira es tan grande como el temor que se te debe!

12 Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría.

13 ¿Cuándo, SEÑOR, te volverás hacia nosotros? ¡Compadécete ya de tus siervos!

14 Sácianos de tu amor por la mañana, y toda nuestra vida cantaremos de alegría.

15 Días y años nos has afligido, nos has hecho sufrir; ¡devuélvenos ahora ese tiempo en alegría!

16 ¡Sean manifiestas tus obras a tus siervos, y tu esplendor a sus descendientes!

17 Que el favor del Señor nuestro Dios esté sobre nosotros. Confirma en nosotros la obra de nuestras manos; sí, confirma la obra de nuestras manos.

La Segunda Lectura - I Tesalonicenses 5:1-11

El día del Señor, o sea, el fin del mundo, vendrá repentinamente como un ladrón en la noche. Entonces, qué velemos, poniéndonos la coraza de fe y de amor, y el casco de la esperanza de salvación.

1 Ahora bien, hermanos, ustedes no necesitan que se les escriba acerca de tiempos y fechas, 2 porque ya saben que el día del Señor llegará como ladrón en la noche. 3 Cuando estén diciendo: «Paz y seguridad», vendrá de improviso sobre ellos la destrucción, como le llegan a la mujer encinta los dolores de parto. De ninguna manera podrán escapar.

4 Ustedes, en cambio, hermanos, no están en la oscuridad para que ese día los sorprenda como un ladrón. 5 Todos ustedes son hijos de la luz y del día. No somos de la noche ni de la oscuridad. 6 No debemos, pues, dormirnos como los demás, sino mantenernos alerta y en nuestro sano juicio. 7 Los que duermen, de noche duermen, y los que se emborrachan, de noche se emborrachan. 8 Nosotros que somos del día, por el contrario, estemos siempre en nuestro sano juicio, protegidos por la coraza de la fe y del amor, y por el casco de la esperanza de salvación; 9 pues Dios no nos destinó a sufrir el castigo sino a recibir la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo. 10 Él murió por nosotros para que, en la vida o en la muerte, vivamos junto con él. 11 Por eso, anímense y edifíquense unos a otros, tal como lo vienen haciendo.

El Evangelio - Mateo 25:31-46

En el juicio final, Cristo vendrá y separará a los creyentes y los incrédulos, y los juzgará. Los creyentes, los cuales producen fruto como evidencia de su fe, recibirán su herencia en el cielo, mientras que los incrédulos, los cuales producen nada más los frutos podridos de incredulidad, recibirán la condenación eterna en el infierno.

31 »Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria, con todos sus ángeles, se sentará en su trono glorioso. 32 Todas las naciones se reunirán delante de él, y él separará a unos de otros, como separa el pastor las ovejas de las cabras. 33 Pondrá las ovejas a su derecha, y las cabras a su izquierda.

34 »Entonces dirá el Rey a los que estén a su derecha: “Vengan ustedes, a quienes mi Padre ha bendecido; reciban su herencia, el reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. 35 Porque tuve hambre, y ustedes me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; fui forastero, y me dieron alojamiento; 36 necesité ropa, y me vistieron; estuve enfermo, y me atendieron; estuve en la cárcel, y me visitaron.” 37 Y le contestarán los justos: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te alimentamos, o sediento y te dimos de beber? 38 ¿Cuándo te vimos como forastero y te dimos alojamiento, o necesitado de ropa y te vestimos? 39 ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y te visitamos?” 40 El Rey les responderá: “Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de mis hermanos, aun por el más pequeño, lo hicieron por mí.”

41 »Luego dirá a los que estén a su izquierda: “Apártense de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. 42 Porque tuve hambre, y ustedes no me dieron nada de comer; tuve sed, y no me dieron nada de beber; 43 fui forastero, y no me dieron alojamiento; necesité ropa, y no me vistieron; estuve enfermo y en la cárcel, y no me atendieron.” 44 Ellos también le contestarán: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento, o como forastero, o necesitado de ropa, o enfermo, o en la cárcel, y no te ayudamos?” 45 Él les responderá: “Les aseguro que todo lo que no hicieron por el más pequeño de mis hermanos, tampoco lo hicieron por mí.”

46 »Aquéllos irán al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.

El Mensaje para Niños

El Himno del Día - Cuán Grande es Él

Sermón Bilingüe -o- Sermón en Español

La Confesión de la Fe - El Credo Apostólico

Declaramos las verdades de la fe que han unido a la iglesia durante miles de años.

Creo en Dios Padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra.

Y creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor; que fue concebido por obra del Espíritu Santo, nació de la virgen María, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, murió, y fue sepultado; descendió al infierno; al tercer día resucitó de entre los muertos, subió al cielo, y está sentado a la derecha, de Dios Padre Todopoderoso; y de allí vendrá de nuevo a juzgar a los vivos y a los muertos.

Creo en el Espíritu Santo, la santa iglesia cristiana, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección del cuerpo, y la vida eterna. Amén. 

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Tarjeta de Contacto en linea

¡Por favor, utilice este enlace para conectarse con nosotros en línea! Háganos saber que adoraste con nosotros o danos una petición de oración.

Oración General

Use este tiempo para orar a Dios por cualquier cosa que esté en su corazón y mente. Recuerde quién es Dios y cómo se describe a sí mismo en la Biblia. Concéntrese en su perspectiva eterna. Considere no solo su propia vida, sino también la vida de los demás. Finalmente, ore con confianza sabiendo que Dios lo escucha y ore en el nombre de su salvador, Jesucristo.

El Padrenuestro

Canta usando el enlace o reza la oración abajo que Jesús enseñó a sus discípulos.

Padre nuestro, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre; venga a nos tu reino; hágase tu voluntad, así en la tierra como en el cielo. El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy; y perdónanos nuestras ofensas, así como nosotros perdonamos a los que nos ofenden; y no nos dejes caer en la tentación, mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino, el poder, y la gloria, por los siglos de los siglos. Amén.

La Bendición

Así como Dios le dijo a Aarón que bendijera a su pueblo de esta manera, le pedimos a Dios que nos bendiga a mientras seguimos con nuestras vidas.

L. El Señor nos bendiga y nos guarde;
    El Señor haga resplandecer su rostro sobre nosotros y tenga misericordia de nosotros;
    El Señor vuelva su rostro hacia nosotros, y ☩ nos conceda la paz.

C. Amén. 

El Himno de Clausura - El Poder de la Cruz